lunes, marzo 19, 2007

...alucinación cuento Fue allí, como tiene que ser...en lo imprevisto. Tenía que -cubrir- una charla sobre El Acuifero Guaraní en Adrogué... Pero, mi nene me recordó... "no te olvides que tenemos que ir a la Casa de la Cultura..., la mamá de Gaby nos invitó, -vá a exponer sus pinturas-" Y fuimos. Alli, el cierre de talleres convocó a una multitud. Cumplimos con -el compromiso de mi hijo y me dediqué a observar el espec táculo. ¡Y fué ahí!,como una argema moenas -mariposa de color amarillo tenue-suave--¡Bella... ¡Bellisima!, se posó, como un péta lo entre la multitud. Hipnotizado, no pude quitar la mirada y tampoco eludir su atrac ción, que me llamaba...me llamaba, como un profundo misterio. Me acerqué a mirarla, y sus ojos..., sus ojos, me miran penetran tes, detràs de sus pestañas entrecerradas. Y ví su templo, don de tenía acumulado sus néctares, que me envolvieron y sometie ron mi voluntad. Algo, me empujaba y me empujaba para acer carme y entregarme al embrujo de su presencia. Me detuve frente a pequeño habitat, que despedía aromas sub yugantes de la conjunción de los extractos y..., sentí morir al susurro de su voz, mientras el rocío de su nectar acariciaba mi piel, y despertó, ¡hasta el último grito de mis sentidos! ¡Sacudí mis neuronas!, me escuché hablar y hablar, y..., también a -la mariposa- que me tenía atrapado y en su bisbeo escucha ba..., abogada, profesora, artesana...artesan...arte... Una vez más sacudí mi cordura y me alejé de su espacio. Y entonces, me cayó toda el agua del Acuifero Guaraní..., que me despertó, y me dedique a mirar a los bailarines. Después, en la soledad de la noche, la sonrisa me cubrió de pe a pa, y pensé, ¿soñé..., o fué una alucinación a la media tarde de un diciembre que recien empieza? ¡No, nada!, me dije como los chicos. -y comencé a teclear sobre el recuerdo de la frágil mariposa, que se fué, despacito entre la multitud. fin JCV